El consumo de agua embotellada en un país como Colombia es algo muy habitual, ya sea por el ritmo de trabajo de la gente, por el deporte que practican, por los altos calores que se viven en varias regiones del país, hasta en las loncheras de los niños, nunca puede faltar la hidratación con la botellita de agua. Sin embargo, un reciente estudio científico ha puesto en duda la seguridad y los beneficios de esta práctica.
Riesgos para la Salud
Según un estudio publicado en BMJ Global Health, el agua embotellada puede contener microplásticos y sustancias químicas como el bisfenol A (BPA) y los ftalatos, que pueden filtrarse desde las botellas de plástico al agua^1^. Estas sustancias son conocidas por sus efectos adversos en la salud, incluyendo trastornos hormonales y estrés oxidativo^2^.
Impacto Ambiental
Además de los riesgos para la salud, el agua embotellada tiene un impacto significativo en el medio ambiente. La producción y el desecho de botellas de plástico contribuyen a la contaminación de los océanos y los ecosistemas terrestres^3^. En Colombia, donde el consumo de agua embotellada es alto debido a las condiciones climáticas y el estilo de vida, este problema es particularmente relevante.
Percepción Errónea
Muchas personas creen que el agua embotellada es más segura y tiene mejor sabor que el agua del grifo. Sin embargo, estudios han demostrado que las diferencias de sabor son imperceptibles y que el agua embotellada no siempre es más segura^2^. En realidad, hasta dos tercios de las botellas de agua contienen agua de grifo reembotellada^1^.
Es fundamental reconsiderar el uso del agua embotellada y fomentar el consumo de agua de grifo, especialmente en países donde cumple con estrictos estándares de seguridad. En Colombia, aunque el consumo de agua embotellada es una práctica común, es importante estar conscientes de los riesgos y el impacto ambiental asociados.